Un análisis genético de un esqueleto de 7.000 años de antigüedad en España muestra que los ojos azules pueden haber evolucionado antes que el cabello rubio y la piel blanca.
El 26 de enero, Carles Lalueza-Fox del Instituto de Biología Evolutiva de Barcelona y sus colegas informaron en Nature de que el esqueleto de la Edad de Piedra pertenecía a un cazador-recolector encontrado en 2006 en una cueva del yacimiento arqueológico de La Braña-Arintero, en el noroeste. España.
El ADN de un diente del esqueleto mostró que se trataba de un hombre conocido como La Brana 1, genéticamente distinto de la mayoría de los europeos actuales.
Los cazadores-recolectores no adquieren lactore y hacen algunas copias de genes que descomponen la estructura del almidón. Estos hallazgos son evidencia de que la capacidad de digerir la leche y el almidón puede haberse desarrollado después de la llegada de la agricultura.
Los ojos del hombre de La Braña eran azules (o al menos no marrones) pero su cabello y piel eran oscuros, los investigadores han decodificado los genes de pigmentación del esqueleto. Este hallazgo indica que la piel clara no era común en toda Europa durante la Edad de Piedra y que el color de los ojos cambió antes de que evolucionara la pigmentación de la piel.